sábado, 23 de febrero de 2008

Chile me pilla a contrapie. San Pedro de Atacama

Llego a Chile y me doy cuenta que no sé nada de este país –si exceptuamos el panorama político de los últimos 33 años– que no sé dónde ir, que no he preparado una pizca esta parte del viaje y que además estoy cansado, sin ganas de ver, ni de investigar… Ya estoy en Puerto Montt, al Sur del país, me queda hablar de los últimos 2.700 km recorridos.

¿Dónde está Chile, papá?
Que yo sea consciente, escuché hablar por primera vez de este país a finales de septiembre de 1973, fue en una revista española llamada Triunfo y en la portada, toda de negro, aparecía el nombre de Chile en la parte inferior, bien grande y en blanco. Me impresionó. En los interiores hablaban de un tipo con gafas y cara de buena persona que se llamaba Salvador Allende, lo habían asesinado. También decían algo de un golpe de estado. Pregunté a mi papá que significaba todo aquello, yo no entendía nada, tenía 13 años y España vivía bajo una dictadura.

Control de Aduanas
Según te vas acercando al puesto fronterizo multitud de carteles anuncian la prohibición de introducir alimentos o animales en Chile. Lo observé como si nada: yo iba limpio…hasta que llegué a la aduana donde guante en mano me revisaron el equipaje a conciencia y encontraron algo que era animal: un colmillo de lagarto, que me había regalado una admiradora brasileña ¡el único regalo que he tenido en este viaje si exceptuamos los de Navidad! Me mosqueé muchísimo y encima me querían empapelar por haber mentido en mi declaración como si yo fuera consciente de tenerlo o de que fuese "un resto animal". Tuve que hacer una nueva declaración.

Alles shön und geflecht!
Entrar en Chile después de Bolivia es un flash, es el paso del Tercer Mundo al Primero y un desierto hace de colchón. En precios, infraestructuras, en el color de piel de sus gentes, en la clase media, en sus viviendas. Todo cambia. Me siento extraño. Casas cuidadas, aceras arregladas, jóvenes de mirada cool, todo el mundo con gafas, ropa de marcas, calzado con marca, cabellos cuidados según los cánones de la moda. Turismo interno, policías de civil. Negocios sin polvo, iluminación correcta, rotulación acorde con el paisaje. Alles schön und geflecht!

San Pedro de Atacama, hecha para el turi
Es una pequeña población, en un oasis, adobedada con conciencia y manteniendo un cierto orden arquitectónico, armonía se dice. Engalanada para el turismo, del cual vive, nacional y extranjero. Estamos en el verano austral y aquello es un hervidero, guiris, guiris y más guiris. Precios guiris, del Norte. Me encuentro perdido, hace un calor de muerte, los cajeros no dan plata, están agotados (y así durante tres días) menos mal que llevo una reserva de dólares, que cambio a un precio bastante desfavorecedor para mi, los cambistas saben de la sequedad monetaria y los hijosdeputa se aprovechan. Los hoteles son caros y me meto en una residencia (albergue) con la habitación más pequeña de todo mi trayecto, no dan toalla y piérdete ¡sin enchufes en todas la habitaciones! El último día les pedí el libro de reclamaciones, me dieron un folio, por ser unos maleducados y no permitirme dejar en custodia mi equipaje durante dos horas antes de mi partida hacia otra ciudad.

Vamos de excursión…
Los paisajes extremos tiene la ventaja de ser muy fotogénicos, a poco que hagas salen lindos, pasó ya en las últimas etapas de Bolivia y vuelve a suceder ahora: el Mirador, Valle de la Muerte (Marte), Valle e la Luna, Llano de la Paciencia, Tres Marías y Gran Duna del cráter central o anfiteatro para esperar la puesta de sol. Lugares cercanos a San Pedro que ofertan las agencias de viajes y que por sus características –áridos, secos, castigados por la naturaleza– se hacen atractivos al ojo humano… por un ratito, claro, porque allí no hay quién viva, buen escenario, magníficas localizaciones, pero solo eso, un ratito y adiós.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Jorge, extraña tu desgana, al leer no he preparado nada de este pais. Estoy en Puerto Montt al sur del pais, pues bien, eso de sur no tiene mucho. Sur lo que se dice sur es la patagonia chilena, que a su vez está divida en dos partes la norte y la sur y tú estás más al norte que la norte.
Yo he estado por allí hace unos meses. Te podría recomendar sitios bonitos, peró en los que yo conozco no te librarás de los guiris.
Mi recomendación es que no te pierdas la patagonia sur, el parque nacional de las Torres del Paine, puerto natales y punta arenas, entre estos dos últimos sitios no hay nada que ver, pura estepa y pura pampa, dicen ellos, y siempre siempre, harto viento.
Yo me quedé con ganas de ver la Laguna de San Rafael en la patagonia norte. Los glaciares, para mí, un espectáculo, aunque supongo que los verás en Argentina.
Por último me sorprende lo de que te hayan tratado mal, a mi me fué de cine, la gente amabilísima y encantadora.
Bueno que te mejore la cosa.
Besos,

Jorge Bonilla dijo...

Hola princesa S, Hablo del Sur, para la visión de los que viven en el Hemisferio Norte. Ya sé que no es el Sur para los que aquí viven. Pasado mañana salgo para las tierras que tú mencionas, Puerto Natales, y la Torres del Paine. A Puerto Arenas no llegaré ya que me paso a Argentina a ver el Perito Moreno.
No, en Chile no me han tratado mal, todo lo contrario, únicamente en esa residencia de San Pedro de Atacama.
Ya te contaré el resto. Un beso.

Anónimo dijo...

Hola Jorge,

yo tenía 11 años cuando conocí el nombre de Chile y Victor Jara y Salvador Allende y el "Putsch" de Pinochet y me gustaron esas canciones de Inti Illimani y Quilapayún. Cuando leí la palabra "de Atacama" me vino en seguida a la mente una canción de Victor Jara que se llama "Pimiento" :

En el centro de la pampa
vive un pimiento.
Sol y viento pa' su vida,
sol y viento.

Coronado por la piedra
vive el pimiento.
Luna y viento lo vigilan,
luna y viento.

Cuando sus ramas florecen
es un incendio:
tanto rojo que derrama,
rojo entero.
Rojo entero.

Nadie lo ve trabajar
debajo'el suelo
cuando busca noche y día
su alimento.

Pimiento rojo del norte,
atacameño,
siento el canto de tus ramas
en el desierto.

Debes seguir floreciendo
como un incendio
porque el norte es todo tuyo,
todo entero.
Todo entero.


Me alegro de haberme acordado por tu impulso y deseo que a pesar de que todo esté "Schön und gepflegt" ("gefleecht" me suena a Norte de Alemania...)para los turistas que encuentres momentos estelares, ánimo.

un abrazo.
Birgit

Marion dijo...

Chile y la nostalgia:
Una de mis imágenes profundamente asociados con chile es un poster de Klaus Staeck, una foto en blanco y negro de Pinochet dónde pone: Die Demokratie muss gelegentlich in Blut gebadet werden. A finales de los 70 ese póster estaba en cualquier WG de Alemania.
Y los primeros chilenos de mi vida los conocí, curiosamente, en el año 75 en Noruega.
Y hoy, domingo, curiosa casualidad, están emitiendo en la 2 un documental en el que cuentan que los ríos de Chile son -casi en su totalidad- propiedad privada, y que ENDESA controla el 80% de las aguas dulces de Chile.
Para consolarme entre el pasado y la actualidad te digo, Birgit, que muy bonito tu comentario. Me suena.

Jorge Bonilla dijo...

Gracias Birgit por recordar viejas letras. A todos los cantantes y grupos que citas yo también los escuchaba con deleite a mediados de los 70. Hoy ya no. En mi cabeza aún resuena la Canta de Santa María de Iquique por Quilapayún o Preguntas por Puerto Montt, de Víctor Jara (http://www.margencero.com/musica/jara/preguntasporpuertomontt.htm) Además de los mencionados, yo añadiría a Violeta Parra, la poeta, la escritora, pintora y tejedora. Verdadera alma matter de la cultura actual chilena.