domingo, 6 de enero de 2008

Iquitos, las paredes hablan…

"Hay que saber reconocer en la vida diaria
los hallazgos inesperados,
hay que tener el ojo entrenado.
Las cosas ocurren cuando uno está atento."

Miquel Barceló
Pintor contemporáneo español

Los elementos que nos circundan tiene un lenguaje propio, determinado por su localización, posición, uso y materiales. A su vez asumen un papel social y comportan parte de un todo (el entorno, la sociedad), son elementos del conjunto y con él se armoniza. Conviven. La Naturaleza y el ser humano se encargan de ello. Los transforman, a los elementos. Es una lucha de poder, imparable… bella.

La compartimentación del espacio
Las paredes son un buen ejemplo, como ya lo fueron los tejados, los perros, el vestuario y tantas cosas que uno ve al cabo del día. Los muros, las vallas, tienen una entidad propia, su verticalidad las define, son elementos aislacionistas, separan , dividen, compartimentan el entorno. Aquí y en Nueva York. Los materiales, sin embargo, cambian según el clima, la localización. el barrio, o la clase social. Aquí y en Nueva York.

Lo primero, dónde estamos
En la Selva Amazónica. Localización: Latitud 03º 45' S. Longitud 73º 14' W
Altitud: 106 msnm. Temperatura media de 26ºC, máxima de 35ºC y mínima de 17ºC. Humedad relativa de 84%.
3º al Sur del eje de la tierra (Madrid está a 40º N) a tiro de piedra del Ecuador. Todo el calor del mundo. Calor tropical, húmedo y lluvioso. Calor y humedad. La diferencia entre la estación seca y la de invierno es que llueve menos en la seca, nada más. En la selva todo se está pudriendo, descomponiendo, al mismo tiempo todo está naciendo, el ciclo de la vida es rapidísimo, acelerado. Un crecimiento imparable. Sol y agua lo determinan.

El reflejo del agua…
…no es sólo un espejo. Y ello se nota en todos los componentes que viven en su entorno: orgánico e inorgánicos. Y las muros de una ciudad, sus vallas no pasan desapercibidos a estos fenómenos, El agua, la humedad lo modifica, las maderas se pudren, el cemento y la arena se cubren de moho, crece vegetación en cada momento… sólo la intervención humana puede acortar o prolongar ese proceso a través de materiales y pigmentos químicos o naturales: lo que se llama renovación, mejorar, arreglar…

El ser humano transformador
Cuando tiene lugar este proceso, el renovador, nos está comunicando que la riqueza aumenta entre sus habitantes, nos explican dónde viven los ricos y los pobres. La falta de renovación es reflejo de un stand by , personal, comunitario o social; y la caída, el deterioro perpetuo, es la constatación de crisis, larga o corta, la plata se dirige a necesidades más básicas. También existe el lavado de cara, de cara al turista, claro, pero no deja de ser un mensaje. Nos habla de las tendencias.

La historia. Los materiales
Las paredes de Iquitos tienen 250 años de edad, algunas siguen siendo igual, mejor dicho se siguen levantando igual que entonces, no han variado un ápice su construcción. Son las del río, las marginadas, madera y paja configuran su paisaje. Las paredes de Iquitos también nos muestran un pasado glorioso, rico, explotador, la época del Caucho, la fiebre de la goma, finales del XIX y principios del XX con materiales importados de Europa: acero, baldosas, azulejos, que se han ido descomponiendo por falta de cuidado (crisis). No faltan el estucado y el ladrillo. Mestizaje.

Rotulación urbana
Nos transmiten, las paredes, que son un buen espacio de comunicación, no sólo se pintan para su conservación sino que se utilizan como reclamos de productos, mensajes o campañas publicitarias, además si me deja poner el nombre de mi candidato en su pared ya la tiene "arreglada" para algunos años. Estos mensajes y su deterioro también nos explican la historia, la cercana, por lo que lleva inscrito y cómo se escribe. La propia pintura en una pared es rotulación. El mensaje: algo ha cambiado.

Tarjeta de presentación
En fin, las paredes inspiran lo que se vive dentro, son como el aroma de una cocina que se extiende por toda la casa, intuimos lo que cuelgan en su interior, lo que encierran, la distribución del hogar. Son una tarjeta de presentación. Es magnifico. Cuando buscamos piso en nuestros países, de altos edificios, hay un acto reflejo, imposible de obviar, que dura desde el portal hasta la vivienda a visitar, se produce cuando vemos la fachada y ¡zas! de repente nos imaginamos el espacio habitable, si nos va gustar o no, su tamaño, su composición, el color y la luz. Pues eso.

Naturaleza, arte, qué es eso?
Las miro, las observo y siento que son la envidia de Tapies, Barceló, Pollock o de los expresionistas abstractos. Siento al mismo tiempo que han estado aquí o allá y han plagiado la naturaleza. Veo sus obras por donde paso, y más donde la naturaleza es cruelmente modificadora y el hombre un ser lento en la renovación. Los muros, sus partes, son verdaderas obras de arte que dan ganas de cortarlas con una sierra y llevártelas a un museo. Que no ocurra, por favor! Id, venid, abrid vuestros ojos y las veréis. Sind Überall.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Como no puede ser diferente aunque sea un nuevo año, quiero decirte que si puedes quédate por aquel Continente y conoce a buena gente que te haga feliz, porque los de tu lugar de orígen, siento decirlo, no tenemos por donde agarrarnos, somos un asco.

Jorge Bonilla dijo...

Eso no es cierto, Mercedes. Allí hay mucho de donde agarrar, aquello no es un asco. Son otros paraisos, sencillamente, otros mundos. Nada más. O quieres que empiece a hablarte de cómo muere la gente por falta de agua potabilizada, la cantidad de personas con problemas oculares por falta de…,o paso a narrarte cómo las personas comparten la basura con los buitres. Puedo seguir hablándote hasta un límite insospechado de la miseria humana. Aquí y allí… pero también de las grandes ventajas que tú dispones por vivir dónde vives.
Un beso

Anónimo dijo...

natur, menschheit, kunst... die kunst macht uns keine besseren menschen, sie bzw die schönheit erlöst uns nur von der tragik unserer kläglichen existenz gegenüber unserer mitmenschen und unserer nachfahren. aber nicht einmal die größten errungenschaften der menschheit werden unsere vermeintliche größe bezeugen, wenn wir nicht mehr da sein werden. der urwald wird alle wände, alle öle auf leinwand, alle kathedralen und alle flugzeuge einnehmen, überwuchern, und lebendig machen. die natur braucht uns nicht

Jorge Bonilla dijo...

La Naturaleza necesita nuestros ojos, la Naturaleza nos necesita. Precisa de nuestros de nuestros sentidos, el olfato, el acto… Si no la sintiésemos de qué iba a presumir la selva si nadie habla de ella, la pinta o la sueña? De qué? Además, la Naturaleza se sirve de nuestros restos, de lo que se engulle, que dices tú, para llegar a ser exultante, dominante…, amazona. Se lo come todo, es insaciable.

Anónimo dijo...

Además de nuestros sentidos, del cuidado. Puedes ver que la naturaleza esa, salvaje exuberante se ha mantenido en algunos sitios, en otros algunos sentidos, precisamente no muy bien puestos, la han maltratado como aquel que solo usa y abusa sin compasión.(Disculpen el comentario conservacionista, creo que es necesario)

Anónimo dijo...

Me acerco más a lo que dice Yuli, y con respecto a lo de aquí me refiero a la prepotencia, a la manipulación, a la deshumanización y al egoísmo desmesurado. Quiero decir que tenemos más medios que a muchos, por supuesto no a todos, les hace ser peores. Y si hablamos de solidaridad, solo lo practican grupillos. Que no Jorge, yo creo que el paraíso humano está dónde menos tienen, o por lo menos es más de verdad. Siempre depende del punto de vista con que se mire, pero yo ya lo he mirado desde diversos ángulos y te aseguro que creo que la buena categoría humana no está en nuestro país, ya sabes el pecado nuestro es la envidia sin parangón, y a partir de ahí sale todo lo demás. Creo que la realidad es así de cruda, y me duele.

Anónimo dijo...

Querida mercedes, te siento tan dolida. Que bueno que existan primero los amigos y estos medios que te permiten drenar todo eso que sientes, no me atrevo a ponerle nombre, es solo tuyo muy personal. Coincido mucho con lo de "...el paraíso humano está dónde menos tienen" Se cultivan inmensamente otros sentimientos, los más puros, lo se de allí vengo. Un abrazo chama y animo

Marion dijo...

¡que filosóficos nos hemos puesto! Nos suele entrar esa vena en los cambios de los años. "dasandereleben", estoy de acuerdo, la naturaleza no nos necesita. (Eso lo dijo ya Marco Aurelio). Aber stellt sich die Frage überhaupt? Sind wir nicht Teil der Natur? ¿No formamos parte de la naturaleza?
Nosotros sí, necesitamos a la naturaleza. Y más a la selva. No necesitamos ni catedrales ni murales en selva. Si no, necesitamos al la selva.

Anónimo dijo...

Perdón por la agresividad que puedan contener mis palabras, pero es que no soporto que un 25% del planeta viva del 75% de la riqueza y un 75% viva del 25% restante. Como tampoco aguanto la educación que se les da a los chavales aquí, no se les enseña a luchar de forma sana por ser autosuficientes, y, a veces, resultan anodinos, y en caso de necesidad no quiero pensar lo que sufrirían. La sociedad de consumo y avanzada se está cargando el planeta para que unos pocos vivan con comodidad y para que los ricos puedan regalarse en Navidad un Jaguar y un collar de diamantes. Como ser humano me niego a aprobar las aberraciones que parece que no somos capaces de superar. Yo siempre confié en un mundo mejor, en cambiarlo a ser posible, pero me parece que somos muy limitados y que deberíamos empezar a pensar en superarnos a nosotros mismos hacia algo más positivo y con sentimientos puros hacia todo lo que nos rodea. Creo que necesito darle un voto de confianza al ser humano otra vez, y supongo que eso está fuera del primer mundo.

Anónimo dijo...

Yo me voy del rollo filosofico y te deseo jorge un superFEliz aÑo!!
Muchos Bezotes
Ada

Jorge Bonilla dijo...

Genial, Ada, genial!!
Un beso.